Hilario,
de profesión ingeniero militar, tenía un talento especial para coleccionar
cosas, su colección completa más célebre fue de billetes de tranvía y autobús
capicúas de los años 50 y 60 de Barcelona. Su hambre de conocimientos lo llevó
a sumergirse en la inabarcable cultura egipcia y de ahí le vino su interés en
la evolución del ser humano para dar respuesta a las filosóficas preguntas ¿De
dónde venimos?, ¿Quiénes somos? y ¿A dónde vamos?
Uno
de los domingos que fue a la plaza Real a cambiar capicúas para su colección le
llamó la atención un puesto que no recordaba haberlo visto antes, era un
espacio dedicado a la evolución humana. Movido por su curiosidad empezó a ojear
los libros que allí se exponían y al final compró uno titulado “Sudor” de un
tal Condestable. No tenía ni idea de quién era el autor. Se llevó a casa para
devorarlo en una noche como en él era habitual.
El índice ya era una declaración de
intenciones al dividir el ensayo en las tres preguntas filosóficas que la
humanidad trata de dar respuesta.
Capítulo 1.- ¿De dónde venimos? En
el Mioceno, los humanos se separaron de los chimpancés hace 7 millones de años.
El 30 de Noviembre de 1974, Donald Johansson descubrió a Lucy en Hadar (Etiopía),
un Australopithecus afarensis que vivió hace 3,18 millones de años. Era bípeda,
se movía con las dos extremidades inferiores para dejar libres las manos y con
ello dar comienzo al crecimiento del cráneo y todas sus consecuencias.
Capítulo
2.- ¿Quiénes somos? Somos animales bípedos que evolucionaron desde Lucy hasta
nuestros días. El pelo del cuerpo lo perdimos para podernos refrigerar con el
sudor cuando empezamos a cazar en las horas más calurosas del día evitando la
competencia con otros carnívoros. Al perder el pelo las crías no se podían
agarrar a la madre para su transporte, pero las manos de ella hacían ese papel.
La mayoría de los seres de sangre caliente tienen pelaje, plumas o
pelo. Cualquier humedad o sudor quedaría atrapado allí. Entonces, la
mayoría de las criaturas no pueden transpirar.
Capítulo 3.- ¿A dónde vamos? Venimos
de animales que al principio no sudaban para llegar a seres que sudan para
refrigerar el cuerpo. La dirección es clara, el siguiente paso evolutivo, para
refrigerar una mayor capacidad craneal, es un humano calvo.
Hilario cerró el libro y se puso a
dormir para el día siguiente ganarse el pan con el sudor de su frente.
Veo que has pasado de lo inquietante a lo humorístico.
ResponderEliminarY en cuanto a la exposición final....pues que haces bien...cada uno tiene que defender lo suyo!!
Como se dice, al final todos calvos. Pero donde va la humanidad, al desastre.
ResponderEliminar