Cthelhu
siente algo nuevo después de dar por finalizada su experiencia.
Cuando
se dio de alta en el Metaverso eligió el avatar de un Homo Sapiens Sapiens recién
nacido en un planeta llamado Tierra. Sus progenitores virtuales vivían en una ciudad
de nombre Barcelona y su vida transcurrió de forma anodina a lo largo de 80
años terrestres, pero, eso sí, conoció a otras personas, familiares, amigos… que
le marcaron profundamente y estaba dispuesto a contactar con sus consciencias
en el universo real para poder compartir sus sentimientos.
El
Metaverso es un universo virtual y digital, codificado por leyes matemáticas donde el
comportamiento de las partículas elementales que constituyen la materia depende
del observador y todo está cuantificado en unidades discretas tanto en la
materia como en la energía. Hay un número de átomos limitado, el espacio y el
tiempo son también limitados. Hay una velocidad máxima (la de la luz) y una
fecha inicial (Big Bang). En cuanto a los seres vivos (avatares), todos tienen
un código de programación estándar llamado ADN.
El
universo real del que forma parte Cthelhu es analógico, infinito y estacionario, el
espacio lo ocupa un éter continuo no discreto ni cuantificado. El tiempo es
infinito y los seres que lo habitan son sólo consciencia y están hechos de luz.
En el momento en que finalizó su vida
en el Metaverso, Cthelhu se conectó con las consciencias que habían
representado algo para él en su experiencia en la Tierra y sintió gozo, paz y
felicidad infinita y eterna.
Tengo entendido que un eminente científico cuántico habitante de la Tierra, que había vivido durante bastante tiempo en Barcelona, un tal "Raymond Carbon" ha manifestado,al leer al Condestable,..."Creía que lo mío había significado algo,pero ahora he comprendido que lo mejor que puedo hacer después de la publicación de estos relatos es dedicarme a ser "boletaire" (recolector de setas), si es que me admiten, claro..."
ResponderEliminarSus comentarios, señor Higienizado, son muy acertados y me dejan sin palabras.
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